creer o no creer...esa es la cuestion

Quien creyera!!! que un viejo de 31 años esté preocupado en este momento por quienes están a su alrededor, por quienes conforman su "selecto" grupo de amigos que sin decir mentiras apenas y puedo llevarlos a los dedos de una sola mano cuando apenas unos años atrás sobraban y necesitaba manos amigas para albergarlos.  Como cambia la vida, pero hasta yo mismo que soy un cúmulo de quejas estoy cansado de ello, es mas, se acerca el nuevo año y es el tiempo cuando uno comienza a hacer propósitos que de repente cambiarán la vida, uno de ellos es no hacer muchos propósitos ni pensar mucho en el mañana, de algo si estoy seguro y es que trataré al máximo de alcanzar los sueños que tengo, la escritura, la pintura y hasta depronto la música.  Volviendo al tema de la credulidad, me siento sumergido en una jaula llena de leones, así podrían describir muchos a su sitio de trabajo pero es cierto, todo aquello que me hacía felíz depronto está tomando un tinte algo oscuro, ya no sé con quien hablar o a quien decir esto o aquello porque de repente todos estamos utilizando las palabras en contra del otro, el dilema no es si creer o no creer en el otro, el dilema está en no volver a abrir mi boca ni que de ella salga nada, solo seré un buen observador, como antes, volver a mi autismo selectivo y vivir con felicidad, no abandonar a aquellos que me quieren que no por vivir en el pasado son menos importantes, ahora siento que los amigos son de verdad y no se constuyen con falsas sonrisas ni favores sencillos.  Sé que soy bueno en lo que hago pero eso es solo un oficio que me permite vivir bien, pero lo que de verdad me gusta hacer no lo estoy haciendo porque me estoy dedicando solo a vivir por lo que me pagan que en cierta manera es triste pero que todos o casi todos hacemos, es un buen propósito, buscar un detonante, una idea, unstalar un signo para salir y por fin empezar a vivir y no llegar a los 50 con varios achaques y sintiendome solo porque no pude debatir entre quien creer o no y lo peor de todo no haber creido en mi.  Y no es tan descabellado pensar y sentir que en quien debo creer ya no lo estoy haciendo y eso me saca de quicio, a vos Dios te debo una disculpa por solo dedicarme a vivir por vivir...