martes, 10 de marzo de 2009

L.O.S.T

Quien puede determinar la ausencia de la razón en estos tiempos cuando la ciudad misma crece como un gigante pulpo que con sus tentáculos nos castiga y nos abraza, es una materna idea que contenemos todos en nuestra mente, pero quien puede decirme a dodnde voy, a donde estoy yendo, se supone que debería ser bueno, que la vida debería ser algo parecido a la felicidad, pero con tantas represiones no me siento capaz de abrir y desplegar mi vuelo. A veces siento que en mi garganta hay tanta cantidad de palabras que quiero sacar pero ellas estan inertes, durmiendo una plácida y confortabke siesta mientras yo me ahogo con todo el silencio en el que estoy viviendo. Ya mis amigos se alejan por mi capacidad de mutismo, soy un transeunte de la ciudad que observa con detenimiento todos los movimientos de los otros, pero que ya nada le sorprende, ni el amor, ni el porvenir, ni lo que hay después del hoy, ni una nueva historia, ya nada mueve mi corazón. En la ciudad cae la lluvia a cada minuto y yo no me muevo, no reacciono, a veces siento que mis letras, lo que mas me gusta de mi mismo no son lo suficientemente coherentes como para que el espectador, lector o receptor de ideas entienda que estoy diciendo, he perdido automaticamente la fe que me acompañaba desde el principio, desde que salí del útero de mi mamá y abrí mi boca para expulsar el aire que estaba guardado adentro, para gritar con un sonido histérico el porque de todo lo que tendré que pasar. necesito aferrarme a una nueva idea, un nuevo comienzo, un nuevo deseo, algo que mueva mis tentáculos, mis propios brazos a estar de nuevo en la ciudad y sentirme atraido por la esperanza, por el amor, por el futuro, por los otros, por los amigos, por mi mismo. Debo volver a sonreir, alejar de mi torax el vacío y la ausencia que tengo a diario y que no se separa de mi cuerpo, la tristeza, la desazón, las ganas constantes de apartarme del mundo y estar en completo solo y callado, solo con la compañía de un buen cd, tal vez una copita de vino, un cigarro y mi cabeza que ya con eso es suficiente. Por el momento como los buenos piratas seguiré buscando tesoros en corazones de hombres valerosos, alimentandome de el deseo del otro, espero que no me pierda mas de lo que estoy, quiero recuperarme un poco para seguir

2 comentarios:

Monchis dijo...

Hummmm... que te diría?

Probablemente si insites en buscar en los demás un reflejo de tí seguirás perdido y solitario.

Saludos,

Anónimo dijo...

Vuelve a leer este post... ahi encontrarás las respuestas que necesitas y recuperarás parte de la fe que crees perdida...

Saludos