cual es el riesgo de tener fe???

En el momento preciso cuando conoces otro sentido, otro rumbo vestido de huesos y con una bonita sonrisa, comienzas a bombardearte tu mismo, inevitablemente sobre las infinitas posibilidades que tienes, te preguntas y te cuestionas sobre lo que sientes, sobre lo que emocionalmente te mueve, observas con detenimiento todos sus movimientos, su expresion, sus ojos y lo que mas te gusta, lo que casi como un fetiche sexual te lleva a concentrarte en un futuro promisorio, en mi caso sin duda alguna su sonrisa que al igual que la mona lisa debe ser encantadora, misteriosa, que cada que aparezca te haga lucir feliz, sus manos, sus palabras, el olor que emana de su cuerpo, todo aquello es la fórmula perfecta para comenzar a tener fé, al igual que todos, yo también me hago siempre la misma pregunta: cual es el riesgo de tener fe??, es una simple alucinación, es la premura en el tiempo o siempre hay que tenerla?. A veces hasta he decidido no pensar en ello y me encuentro entonces en medio de una completa divagación, ser simplemente un espectador que espera y espera, otras en cambio quisiera compartir mi vida de inmediato y también que esa fé a la cual me aferro como un último suspiro fuera como una premonición, como el regalo que te dan por haber obtenido buenas calificaciones, pero en la vida no hay tal cosa, no se aún si hay recompensas, no sé si hay regalos fantasmales vestidos con ropa de humano de treinta y un años y una bonita sonrisa. Solo tengo algo muy claro, que siempre sentiremos lo mismo cuando nos sentimos a gusto con alguien que despierta en nosotros el volver a creer en esto, en el romance, en las relaciones, asi tu no lo hayas sido en muchas ocasiones, así hayas roto mil corazones y no te aprecien, así no lo hayan sido contigo, siempre hay que tener un poco de esperanza, porque detrás de la cortina de humo estará la verdad, siempre hay sol, asi la noche sea muy oscura, ahí está escondido bajo la penumbra de un globo terraqueo. El ahora se presenta con un buen regalo, con la fé que había enterrado por múltiples causas, por mis propios enfrentamientos, por la gula hacia las relaciones, por la vanidad y por el exceso, pero aún con todo y eso siempre hay que encenderle velitas a los santitos y creer mas que en eso, en lo que estamos haciendo y mas aún en lo que somos. Creo que ese es el riesgo de tener fé, que de una u otra manera siempre obtenemos nuestras respuestas.